Don't funk with my heart
¿Qué tendrá la primavera que la sangre nos altera?
El caso es que este es mi segundo tema amoroso en dos días. ¡Menudo retorno! La necesidad de escribir me vuelve a corroer. La necesidad de compartir conmigo mismo mis propias reflexiones y además hacerlas extensibles a personas ajenas hace que me siente delante de este teclado con el único motivo de poner por escrito el análisis de mis cavilaciones más recónditas.
A veces me asalta la duda de la conveniencia de la publicación de esta clase de artículos en un sitio tan público como este. Definitivamente somos lo que sentimos con lo que ello implica: si queremos mostrar como somos debemos mostrar como nos sentimos. Conocer a una persona implica conocer sus sentimientos profundos y muchas veces estos no pueden transmitirse a plenitud con la vanidad y lo acelerado de algunas de las conversaciones que mantenemos cada día. Cuantas veces no hemos querido abrir nuestro interior y deshacernos en los oídos de algún amigo íntimo y al final hemos desistido porque la conversación derivó hacia otros temas o simplemente consideramos inoportuno una exposición tan abierta de nuestro interior.
Después de este breve periplo introductorio quiero centrarme en el tema que quería tratar. El origen de este título tan (o tan poco) sugerente está en la nueva canción de Black Eyed Peas. Parece mentira como un análisis fino de tan simple frase puede revelarnos muchos secretos y llevarnos a ver lo apropiado de su elección con el conjunto de este artículo.
Empecemos: el verbo "funk" no existe con la particula "with" sin embargo en música es habitual verlo como sustituto del tan denostado "fuck". Por lo tanto una primera traducción finolis del título podría llevarnos a "No fastidies mi corazón" o bien una menos llamativa y más usual "No juegues con mi corazón". ¿Por qué no lo titularon con "play" entonces? Bien, "funk" de siempre está relacionado con la música, de ahí viene por ejemplo el adjetivo "funky". Sin embargo donde quería llegar es a otra de las acepciones del verbo "to funk": retraerse por miedo de.
Y este es el tema del artículo: No te retraigas por miedo de mi corazón y no fastidies mi corazón.
¡Cuanto mensaje en una sola frase y sin embargo que contradictorio es llevar a la práctica ambos enunciados simultáneamente!
Adentrémonos un poco más en el análisis más allá de la sintaxis. En la vida real y sobretodo dentro del subapartado amoroso se hace realmente difícil cumplir la primera parte de la oración copulativa. ¿Es posible no retraerse por el miedo al corazón del ser amado sea que este nos corresponda o no?
Desde luego todo va en el interior de cada persona. La experiencia impersonal me dice que es posible abstenerse de mostrar dichos sentimientos amorosos, sin embargo, acaba por hacerse algo tedioso como si se tratara de un lastre que va acumulando peso e impide avanzar a una embarcación.
La incerteza de una correspondencia unívoca entre corazones es algo presente constantemente. Es común que las parejas se pregunten con frecuencia si se quieren para sentir por boca del otro que realmente esa correspondencia existe. Por otro lado también estan aquellos rechazados que una tras otra vez necesitan asegurarse de que la otra persona realmente no les corresponde y se martirizan tras el dicho: quien la sigue la consigue.
La segunda parte de la oración no es mucho más halagüeña.¡Cuantas veces fastidiamos el corazón de aquellos a quienes queremos! Algunas veces por el simple hecho de no corresponder con nuestros sentimientos a una persona le estamos fastidiando el corazón hasta límites insospechados. Muchísima gente queda trastocada o inhabilitada temporalmente para amar tras experiencias amorosas traumáticas (creo que, muy a mi pesar, este grupo debería contarme entre sus miembros). Es cierto que las heridas son reparables pero suelen permanecer bastante tiempo abiertas y supurando.
Cuantas veces habremos pensando o dicho esta frase siendo los objetos de ella en vez de los sujetos: "¡No juegues con mi corazón!". Sencillamente duele.
Cambia mucho la situación de ser objeto a sujeto. Cuesta darse cuenta cuando uno juega con los demás. No es sencillo conocer cuando uno con sus actos triviales o premeditados esta llegando a tocar la fibra sensible del otro, aquella que hace que poco a poco sus sentimientos maduren. Es entonces cuando se juega con su corazón. Es entonces cuando el riesgo de dañarlo está latente. De hecho en el juego del amor siempre se ha jugado con corazones.
Por supuesto este tema no es una ciencia exacta. Aprendemos de nuestros errores y es responsabilidad nuestra mejorar para la próxima vez. Hasta que ya no haya una próxima.
En el aspecto personal solo me queda decir que reconozco mis fallos, sé donde erré más no supe verlo cuando debía. Pagué la inexperiencia del primerizo. Tan sólo espero que no vuelva a suceder.
... sin embargo me asalta la duda de si todo esto lo veo ahora simplemente porque estoy asomándome al abismo ese al que todos nos asomamos cuando hacemos de una amiga alguien especial y nos vemos susceptibles de ser los próximos cuyo corazón necesite un remiendo .... otro más .... es entonces cuando en mi interior una voz va haciendose cada vez más audible ... me paro a escucharla y me repite .... DON'T FUNK WITH MY HEART!
El caso es que este es mi segundo tema amoroso en dos días. ¡Menudo retorno! La necesidad de escribir me vuelve a corroer. La necesidad de compartir conmigo mismo mis propias reflexiones y además hacerlas extensibles a personas ajenas hace que me siente delante de este teclado con el único motivo de poner por escrito el análisis de mis cavilaciones más recónditas.
A veces me asalta la duda de la conveniencia de la publicación de esta clase de artículos en un sitio tan público como este. Definitivamente somos lo que sentimos con lo que ello implica: si queremos mostrar como somos debemos mostrar como nos sentimos. Conocer a una persona implica conocer sus sentimientos profundos y muchas veces estos no pueden transmitirse a plenitud con la vanidad y lo acelerado de algunas de las conversaciones que mantenemos cada día. Cuantas veces no hemos querido abrir nuestro interior y deshacernos en los oídos de algún amigo íntimo y al final hemos desistido porque la conversación derivó hacia otros temas o simplemente consideramos inoportuno una exposición tan abierta de nuestro interior.
Después de este breve periplo introductorio quiero centrarme en el tema que quería tratar. El origen de este título tan (o tan poco) sugerente está en la nueva canción de Black Eyed Peas. Parece mentira como un análisis fino de tan simple frase puede revelarnos muchos secretos y llevarnos a ver lo apropiado de su elección con el conjunto de este artículo.
Empecemos: el verbo "funk" no existe con la particula "with" sin embargo en música es habitual verlo como sustituto del tan denostado "fuck". Por lo tanto una primera traducción finolis del título podría llevarnos a "No fastidies mi corazón" o bien una menos llamativa y más usual "No juegues con mi corazón". ¿Por qué no lo titularon con "play" entonces? Bien, "funk" de siempre está relacionado con la música, de ahí viene por ejemplo el adjetivo "funky". Sin embargo donde quería llegar es a otra de las acepciones del verbo "to funk": retraerse por miedo de.
Y este es el tema del artículo: No te retraigas por miedo de mi corazón y no fastidies mi corazón.
¡Cuanto mensaje en una sola frase y sin embargo que contradictorio es llevar a la práctica ambos enunciados simultáneamente!
Adentrémonos un poco más en el análisis más allá de la sintaxis. En la vida real y sobretodo dentro del subapartado amoroso se hace realmente difícil cumplir la primera parte de la oración copulativa. ¿Es posible no retraerse por el miedo al corazón del ser amado sea que este nos corresponda o no?
Desde luego todo va en el interior de cada persona. La experiencia impersonal me dice que es posible abstenerse de mostrar dichos sentimientos amorosos, sin embargo, acaba por hacerse algo tedioso como si se tratara de un lastre que va acumulando peso e impide avanzar a una embarcación.
La incerteza de una correspondencia unívoca entre corazones es algo presente constantemente. Es común que las parejas se pregunten con frecuencia si se quieren para sentir por boca del otro que realmente esa correspondencia existe. Por otro lado también estan aquellos rechazados que una tras otra vez necesitan asegurarse de que la otra persona realmente no les corresponde y se martirizan tras el dicho: quien la sigue la consigue.
La segunda parte de la oración no es mucho más halagüeña.¡Cuantas veces fastidiamos el corazón de aquellos a quienes queremos! Algunas veces por el simple hecho de no corresponder con nuestros sentimientos a una persona le estamos fastidiando el corazón hasta límites insospechados. Muchísima gente queda trastocada o inhabilitada temporalmente para amar tras experiencias amorosas traumáticas (creo que, muy a mi pesar, este grupo debería contarme entre sus miembros). Es cierto que las heridas son reparables pero suelen permanecer bastante tiempo abiertas y supurando.
Cuantas veces habremos pensando o dicho esta frase siendo los objetos de ella en vez de los sujetos: "¡No juegues con mi corazón!". Sencillamente duele.
Cambia mucho la situación de ser objeto a sujeto. Cuesta darse cuenta cuando uno juega con los demás. No es sencillo conocer cuando uno con sus actos triviales o premeditados esta llegando a tocar la fibra sensible del otro, aquella que hace que poco a poco sus sentimientos maduren. Es entonces cuando se juega con su corazón. Es entonces cuando el riesgo de dañarlo está latente. De hecho en el juego del amor siempre se ha jugado con corazones.
Por supuesto este tema no es una ciencia exacta. Aprendemos de nuestros errores y es responsabilidad nuestra mejorar para la próxima vez. Hasta que ya no haya una próxima.
En el aspecto personal solo me queda decir que reconozco mis fallos, sé donde erré más no supe verlo cuando debía. Pagué la inexperiencia del primerizo. Tan sólo espero que no vuelva a suceder.
... sin embargo me asalta la duda de si todo esto lo veo ahora simplemente porque estoy asomándome al abismo ese al que todos nos asomamos cuando hacemos de una amiga alguien especial y nos vemos susceptibles de ser los próximos cuyo corazón necesite un remiendo .... otro más .... es entonces cuando en mi interior una voz va haciendose cada vez más audible ... me paro a escucharla y me repite .... DON'T FUNK WITH MY HEART!
9 comentarios
isRa -
En cuanto a tus comentarios: el autoexamen para conocerme a mi mismo viene de largo, es algo que todos hacemos o por lo menos deberíamos. Estoy contento de haberte transmitido dolor pues era justo lo que pretendía.
En realidad siempre he estado abierto al amor y su mundo. Como comenté en otras ocasiones el "problema" es querer mantener todo bajo control, es decir, racionalizar las emociones. Eso suprime toda tentativa de arriesgarse, algo muy necesario en el amor.
En cuanto a lo de que TODO llega eso suele ser cierto para la mayoría de las personas, sin embargo, muchas acaban anulando deseos para ser felices (algo muy cercano a la filosofía budista) y acaban acomodandose a una vida que no era la que esperaban.
Saludos ... y gracias por lo detallado de tu respuesta!
Ausa -
Saludos
Ausa -
Estoy segura que la espera vale la pena y de que TODO algún día llega, solo hace falta ser paciente y saber esperar, porque un paso en falso nos puede hacer mucho daño.
Ausa -
Ausa -
Anónimo -
isRa -
isRa
Cárdenas -
aZaH@rA -
No tengo nada que añadir.